WWF Bolivia ha establecido el programa de emergencia ante incendios forestales, a través del cual implementa acciones para abordar la emergencia y las consecuencias de los incendios en el futuro.
Entre agosto y noviembre de 2019, Bolivia se vio impactada por incendios forestales, los cuales afectaron 6,4 millones de hectáreas a nivel nacional.
Existen varios factores que han incidido en el brote del fuego entre ellos un modelo económico basado en la producción intensiva y a gran escala de cultivos y ganado de consumo, acaparamiento y especulación de tierras, políticas inapropiadas de uso de la tierra, factores climáticos incluido un alto déficit de agua y un promedio de temperaturas más algo en comparación a años anteriores, etc. Estos factores conducen a tasas crecientes de deforestación que también están vinculadas a los incendios. Bolivia ocupa el quinto lugar en el top 10 de países que han perdido la mayor cantidad de bosques tropicales, con 154,488 ha. perdidas, según el Instituto Mundial de Recursos (World Resources Institute).
Más de 6 millones de hectáreas fueron afectadas en todo el país. De esta cifra, 4,2 millones de hectáreas corresponden al departamento de Santa Cruz, de las cuales:
• 2,2 millones corresponden a áreas protegidas
• 2 millones de hectáreas corresponden a bosques
• El 69% corresponde a pastizales
Las áreas protegidas más afectadas fueron San Matías (798,521 ha), Ñembi Guasu (446,217 ha) y Otuquis (390,314 ha). Además, 541,662 hectáreas de tierras comunitarias se vieron afectadas en el bosque Seco Chiquitano.
El programa de respuesta a incendios forestales de WWF Bolivia se activó, la segunda semana de agosto, con la primera tarea de monitorear los impactos en el suelo en las comunidades y áreas protegidas en el Amazonas, el bosque seco de Chiquitano, Pantanal y Chaco. Nuestro apoyo ha llegado a diferentes paisajes, áreas protegidas y comunidades, con el apoyo de nuestros socios locales, como muestran los siguientes gráficos: